NUEVA YORK, 09 August 2022 / PRN Africa / — Sam Aderobu comenzó su empresa, Honey Pride, en Arua, distrito al norte de Uganda, con el fin de ayuda a su comunidad. Ahora, con el apoyo de la ONU, el negocio está despegando, proporcionando trabajo a cientos de apicultores locales, muchos de los cuales son mujeres y jóvenes marginados.
“Yo trabajaba en una oficina, y la gente venía a mi lugar de trabajo para vender miel del Nilo Occidental, llamada así por la región de dónde vengo. Me llamó la atención saber que mi región estaba siendo utilizada como marca, y descubrí que el Nilo Occidental es una de las mejores regiones de Uganda para la producción de miel.
Así que decidí volver a casa y empezar una empresa para servir a mi comunidad”.
Un producto en demanda
El producto está en demanda tanto a nivel local como internacional, y tiene propiedades medicinales y alimentarias positivas. Nos dimos cuenta de que hay un gran potencial para producirlo a gran escala.
Sin embargo, muchas personas en esta región están recogiendo miel de manera tradicional, como una afición. Antes los trabajadores no tenían ningún apoyo formal, nadie estaba dispuesto a invertir en apoyarlos para mejorar la calidad de su miel, así que decidimos orientar a los agricultores y proporcionarles las formaciones para que tuvieran las habilidades necesarias.
Hoy, trabajamos con más de 1700 agricultores que cosechan miel de apiarios en sus tierras. Proporcionamos un mercado confiable para ellos, esto los alienta a producir más.
SOURCE Centro de Noticias ONU